Si a los fanáticos les hubiesen permitido entrar a ver a los bateadores de los White Sox que participaron el minicampamento del club, que terminará el jueves en Camelback Ranch, lo más probable es que el cubano Yoan Moncada se hubiese llevado su primera ovación como miembro de su nuevo equipo.
La práctica de bateo terminó siendo una impresionante exhibición de este ambidextro de 21 años con cuerpo de jugador de fútbol americano. Bateando a la zurda, Moncada mandó un par de envíos hacia el jardín izquierdo. Siguió con un palazo sobre la cerca por el jardín central de uno de los campos traseros del complejo, que dentro de poco más de cinco semanas servirá de sede de los entrenamientos primaverales de Chicago.
"Yo me describiría a mí mismo como un bateador de poder porque ahora tengo más fuerza", le dijo Moncada a MLB.com después de la práctica. "Me gusta mucho darle a la bola hacia todo el terreno.
"Yo me describiría a mí mismo como un bateador de poder porque ahora tengo más fuerza", le dijo Moncada a MLB.com después de la práctica. "Me gusta mucho darle a la bola hacia todo el terreno.
"Obviamente es alguien muy fuerte", dijo Chris Getz, director de desarrollo de jugadores de los White Sox. "Tiene el cuerpo de un atleta fornido. El hecho de que sea ambidextro, que tenga poder y habilidad para batear te hace pensar que su potencial es ilimitado".
Esas palabras son música para los oídos de los aficionados del equipo.
Moncada está ubicado como el prospecto número 1 de todo el béisbol, de acuerdo con MLBPipeline.com. El cambio que lo trajo desde los Medias Rojas, que lo firmaron en un principio por un bono récord de US$31.5 millones, dejó perplejos a los seguidores de los White Sox, aunque ello hubiese resultado en la partida del as Chris Sale. Ahora, el talentoso infielder es visto extraoficialmente como la pieza central del proceso de reconstrucción del club.
Este minicampamento para bateadores le dio a Moncada la oportunidad de compartir con algunos de sus nuevos compañeros, pues cuando se produjo el cambio estaba medio de un viaje fuera del país.
"No me lo esperaba. Pensé que me iba a quedar en Boston mucho tiempo", dijo Moncada. "Pero ahí es cuando te das cuenta de que esto es un negocio. Ahora tengo la oportunidad de jugar con este equipo y hacer cosas grandiosas aquí.
"Las conversaciones con él han ido muy bien. Es un muchacho muy maduro, con buen juicio", dijo el manager de Chicago, Rick Rentería, refiriéndose a Moncada. "Puedes ver que tiene el talento físico, de eso no hay dudas. Obviamente todos en la organización esperamos que sea una parte muy importante del futuro de los White Sox".
Aunque Moncada no había bateado por un buen tiempo, Rentería quedó impresionado con lo mostrado por el cubano. El joven bateó .211 en 20 visitas al plato con los Medias Rojas la temporada pasada tras ligar para .294 con 15 jonrones, 31 dobles, seis triples, 62 empujadas y 45 bases robadas en dos sucursales de las menores.
La velocidad es parte importante del juego de Moncada, quien señaló que le gusta tocar la pelota, aunque no haya podido hacerlo mucho desde que llegó a los Estados Unidos. Esta temporada muerta ha estado muy ocupado entre el canje y una visita a Cuba en diciembre, la primera desde que llegó a radicarse en los Estados Unidos. Allá tuvo la oportunidad de ver a sus padres por primera vez en dos años.
Que sus padres, Manuel Moncada y María Caridad, puedan unírsele en los Estados Unidos y verlo jugar es un sueño para Moncada. Para los fanáticos del sur de Chicago, contar con Moncada es también un sueño.
"Estará en el campo de entrenamientos de Grandes Ligas; competirá por un puesto y a partir de allí iremos viendo", dijo Getz. "Tiene una personalidad muy divertida y sabe de béisbol. Te puedes dar cuenta de ello después de las pocas conversaciones que he tenido con él. Será divertido.
"Sin duda alguna, nos ha impresionado".
No hay comentarios:
Publicar un comentario